Con profundo pesar, las autoridades confirmaron que el desastre provocado por el desborde del río Piraí en el municipio de El Torno dejó un saldo de 20 personas fallecidas. Así lo informó el viceministro de Defensa Civil, Alfredo Troche, quien precisó que cuatro víctimas ya fueron oficialmente identificadas y se trabaja para certificar a las demás. Ante la magnitud de la tragedia, la Gobernación promulgó la declaratoria de desastre departamental mediante el Decreto N° 514.
Los equipos de emergencia atendieron a 385 personas, lograron evacuar a 222 y mantienen a 29 internados, además de realizar traslados especializados por casos de gravedad. La afectación alcanza a unas 600 familias en El Torno y a cerca de 1.500 en la zona de Colpa Bélgica, donde colapsó el puente que conecta con la carretera a Warnes. Santa Cruz y Beni mantienen municipios en alerta roja, mientras que otros departamentos del país continúan en alerta naranja.
Los operativos de rescate se activaron desde la madrugada del sábado 13 de diciembre, con apoyo aéreo de la Fuerza Aérea Boliviana, que permitió evacuar a más de 280 personas. Asimismo, se rescató a 148 internos del centro de rehabilitación juvenil Cenvicruz, debido a que las vías terrestres permanecen intransitables. En la zona trabajan médicos, rescatistas de la Gobernación y efectivos de las Fuerzas Armadas.
Las autoridades reconocen que el escenario sigue siendo incierto, marcado por años de falta de planificación preventiva, lo que hoy limita la respuesta frente a emergencias naturales. Pese a ello, se mantiene un trabajo coordinado y transparente desde el COED, con informes oficiales diarios, y se han activado gestiones de ayuda internacional con organismos como la ONU y el Banco Mundial.
Como medio cristiano, nos unimos al dolor de las familias que hoy lloran a sus seres queridos y elevamos una oración por consuelo y fortaleza. En medio de la adversidad, también se hace visible la solidaridad y el esfuerzo conjunto para cuidar la vida y acompañar a quienes más lo necesitan.
